domingo, 3 de noviembre de 2013

001 - Condottiere (1995)

La adquisición de mi Condottiere es muy reciente, y mis conocimientos sobre el juego son todavía escasos, pero intentaré que todos acabemos comprendiendo mejor este juego.
           Antes de continuar, veamos una imagen de la caja del juego:
              Las reglas del juego son realmente sencillas, con pocas cartas que aprender y un funcionamiento muy intuitivo y fácil. Lo complicado es decidir cuál de las distintas formas de juego utilizar para la partida, ya que éste varía mucho dependiendo de la forma elegida.
             Robar 3 cartas después de cada conquista es quizás la más popular de todas ellas, al menos en mi grupo, aunque a mí me gusta la forma de juego original. Más adelante las explicaré, (esto es simplemente para haceros una idea de las distintas formas que hay de jugar al juego). Además, dependiendo del grupo de personas que reúnas para jugar una partida, cambiará la forma de juego.
             Aunque muchos jugones le otorguen la etiqueta de impredecible, el Condottiere es un juego que se deja jugar gracias a las muchas variantes que tiene, como vengo diciendo.
Componentes:
Condottiero viene en una pequeña caja, y contiene:
1 Tablero de juego
110 Cartas
1 Contador de Condottiero
1 Contador de Favor del Papa
36 Marcadores de control de 6 colores diferentes
1 Libreto de reglas
 Preparación del juego:
              Se coloca el tablero de juego en medio de la mesa, accesible a todos los jugadores. Posteriormente cada jugador coge 6 Marcadores de control de un color y los pone delante de él. Se barajan las cartas y se reparten diez a cada jugador, colocando las restantes en un mazo cerca del tablero. A continuación, se decide quién es el jugador inicial y éste coge el Contador de Condottiere. 
            El jugador inicial sitúa el Contador de Condottiere en la provincia del mapa que él desea, y que se convertirá, a partir de ese momento, en codiciada por todos los jugadores. A continuación, baja una carta de su mano y la pone frente a él. Seguidamente, el siguiente jugador a su izquierda puede o bien pasar o bien colocar una carta de su mano sobre la mesa en su lado del tablero. Una vez que un jugador pase, no podrá pujar más sobre esa provincia en este turno. La ronda acaba cuando todos los jugadores se retiran. 
Objetivo del juego:
             El juego es una especie de juego de mayorías, (aunque no sabría bien cómo catalogarlo, no vaya a ser que me lapiden), en el que cada jugador va jugando sus cartas desde su mano hacia la mesa de juego, colocándolas boca arriba frente a él.
           Cada carta tiene un valor de combate -por llamarlo de alguna manera-, a excepción de las cartas especiales. Cuando todos los jugadores se retiran de la puja, se suman todos los valores de combate de cada jugador, y el jugador que tenga la suma total más alta ha conquistado ese territorio. 
           El juego termina cuando un jugador ha conquistado un número de territorios decididos al principio de la partida, o bien un número de territorios adyacentes entre si, también decididos al principio de la partida y que dependen del número de jugadores en mesa. 
Reglas del juego:
             Como he comentado anteriormente, el juego dispone de unas reglas oficiales y otras alternativas para darle más fluidez y adaptarse a cada grupo de jugadores. 
            Según las reglas oficiales, nadie roba cartas entre ronda y ronda hasta que sólo quede un jugador con cartas, por lo que hay que medir bien por qué territorios te interesa pujar y qué territorios es mejor dejar pasar, guardando así las cartas para los venideros. 
            Algunas reglas opcionales son, por ejemplo, que cada turno de juego (un turno de juego acaba cuando se termina una puja), cada jugador robe 3 cartas, hasta un máximo de 10 cartas más 1 por cada territorio que sea de su propiedad. Ésta es la variante más jugada, al menos entre mis jugadores, ya que te permite seguir jugando muchos más turnos e incluso jugártela o molestar en determinadas partes de la partida. 
            Otra regla opcional es completar la mano al final de cada turno, con un total de cartas de 10 más 1 por cada territorio que sea de tu propiedad. Esta variante, según mi punto de vista, (y aunque a priori parezca todo lo contrario) hace el juego más lento y menos vistoso que las dos anteriores. 
¿Qué pasa si hay un empate por un territorio? 
            La ronda termina y nadie gana el territorio. Todo el mundo se descarta de las cartas jugadas y se vuelve a pujar por el mismo territorio hasta que alguien lo obtenga.
 Cartas Especiales:
             Ya he comentado el grueso de cartas del mazo de juego, que son los ejércitos, cartas que tienen un valor de combate numerado del 1 al 6, si bien hay ejércitos con un valor de combate de 10. Pues bien, aparte de estas cartas, y para hacer más jugable al juego, hay otras cartas que carecen de valor de combate pero que tienen distintas habilidades, como por ejemplo el Espantapájaros, que no tiene valor de combate, y se puede jugar sobre la mesa sin usar su habilidad y como carta inútil (a priori). Su habilidad es el poder sustituirlo por una carta de ejército de la mesa. La carta sustituida se coloca cerca de tu posición y al comienzo de la próxima ronda, la recuperas. Bastante útil si ves que tienes la provincia perdida o bien para ir alargando la cosa para ver qué hacen tus compañeros de mesa.
             Otra carta especial es por ejemplo el Tambor, que dobla la puntuación de combate de todas las cartas de ejército. O La Heroína, que tiene un valor de combate de 10 y que no puede ser afectada por ninguna otra carta. Por último, La Cortesana, que no tiene valor de combate,  hace que al final de la puja, quien tenga más cartas de ese tipo en la mesa gane el Contador del Favor del Papa.
             Este contador sirve para que, al colocarlo sobre una provincia antes de que el propietario del Contador del Condottiere elija la provincia por la cual se va a pujar, esa provincia no pueda ser elegida por éste. 
Conclusión:
            Resumiendo, y disculpad la brevedad de esta reseña, (tampoco voy a explicar todas las reglas, que para eso te puedes descargar las instrucciones del juego desde su página oficial), he de decir que es un juego muy bueno, aunque no ha gustado a todos los jugadores de mi grupo de juego. Según muchos es un juego muy sencillito de aprender, transportable y con el que puedes jugar muy buenas partidas. Muy recomendable.

viernes, 18 de octubre de 2013

Noticias

Comenzamos el blog con unas noticias sobre el mundillo, que espero que os gusten. Os intentaremos mantener informados en lo máximo de lo posible. Al grano.

Según parece, ya se ha confirmado que Asmodee va a traducir el juego Augustus. Un gran acierto para mis amigos de la editorial, ya que el juego ha sido uno de los nominados para el Spiel des Jahres 2013.


En Augustus competirás con los demás jugadores para completar las cartas de "objetivos" para lograr poderes especiales y en última instancia lograr puntos de victoria. Cada carta tiene 2-6 símbolos en los que se deben posicionar meeples legionario con el fin de completar la carta. Estos símbolos se sacan uno a uno de una bolsa, con todos los jugadores ganando el beneficio por igual, pero, curiosamente, hay más de algunos símbolos que otros.


Edge ha anunciado que publicará dentro de poco una nueva expansión para Battlestar Galactica, en este caso se llamará Amanecer, centrada en la última parte del viaje de la nave y su tripulación, por lo que creo que será la última que aparecerá para el juego de mesa.


Esta expansión incorpora 12 nuevas hojas de personaje, 30 nuevas cartas de Crisis y 25 nuevas cartas de Habilidad. Y el modo de juego "En busca del hogar", que añade, aparte de otras muchas cosas, un nuevo tablero de juego para la Demetrius, la nave de procesamiento de residuos que se convierte en la única salvación posible para la flota.


Otro juego que será presentado en Essen, será Plunder ¿Dónde esta el tesoro?, un juego diseñado por Jonathan Franklin, de deducción para 2 a 6 jugadores.


La idea del mismo es muy simple, cada uno de los jugadores es un capitán pirata que ha escondido su tesoro, el objetivo es encontrar las riquezas de los demás mientras mantenemos nuestro cofre a salvo. Tiene pinta de ser un juego de cartas muy rápido, sin mayor pretensión que la de pasar un buen rato.